lunes, 30 de julio de 2012

Secretos Capítulo 3


Holaa~~ bueno aquí traigo la continuación del fic y quería comentar además que he visto que me han comentado en el oneshot de <<Recuerdos>> diciendo que lo continuara pensaba dejarlo así como oneshot pero visto que os ha gustado pues haré una continuación :3 aunque no sé cuando, supongo que no tardaré mucho pero si tardo sed pacientes los que lo leais *////* muchas gracias por comentar que me anima mucho y por leer :3 se os quiere <3

Capítulo 3:

-Bueno ¿dónde te apetece ir?- le pregunté.
-Da igual, donde sea contigo-me dijo sonriendo.
-Vayamos al centro comercial y te invito al helado ese que te gusta tanto-
Comenzamos a andar dirigiéndonos al centro comercial hablando de varias cosas, cuando noté que Chinen me cogió de la mano, me encantaba su mano era tan suave aunque ya se notaba como la de un hombre. Aun recuerdo cuando eramos pequeños que su mano era siempre más pequeña que la mía.
Seguimos de camino al centro comercial, cuando llegamos subimos a la última planta la cual daba a una terraza grande con varias cafeterías y heladerías. Allí nos dirigimos a la heladería y le compré el helado que tanto le gustaba, era bastante raro era una mezcla de fresa y café, nunca quise probar, me gustaba mirarlo mientras comía feliz su helado.
Nos acercamos a la barandilla desde donde se veía toda la cuidad. Como estaba atardeciendo el cielo tenía un color amarillento tirando a rojizo, me encantaban aquellos colores y esas vistas.
-Yamachan ¿me acompañas a tirar el papel?- me preguntó Chinen sacándome de mis pensamientos.
Lo acompañé hasta la papelera, aún íbamos cogidos de la mano pero por poco tiempo..
-¡YAMADA!- se oyó una voz de una chica gritando mi nombre. Me giré y vi que era una chica de mi clase, le solté bruscamente la mano a Chinen mientras la chica se dirigia hacía nosotros, temía por si nos había descubierto pero parece ser que no se dio cuenta.
-Hola Mariko- sonreí algo nervioso.
-Que suerte encontrarte y también está Chinen- dijo mirándolo mientras sonreía.
-¡Hola Mari-chan!-
Mariko era la subdelegada y como yo era el delegado pasaba mucho tiempo con ella.
-Oye Yamada... ¿me podrías ayudar?-
-¿Eh? Ah sí, ¿con qué?-
-Es sobre un libro- decía mientras comenzaba a andar, la seguimos junto con un amigo suyo- es que quiero comprármelo pero no sé cual es mejor y quiero que me aconsejes, es sobre las universidades-
La acompañamos y la ayude a elegir, la tarde con Chinen se había ido ya que estuvimos bastante rato con ella y cuando por fin nos quedamos solos era la hora de volver a casa. Me sentía bastante mal... sé que le hacía ilusión porque pocas veces podíamos estar juntos de esa forma y para que engañar yo también lo deseaba.
El camino a casa se volvió algo incomodo ya que ninguno de los dos hablaba, decidí romper aquel incomodo silencio.
-Esto... Chinen...-
-No te preocupes Yamachan-me interrumpió- se que te tienes que comportar de esa forma, no te preocupes- me dijo alzando la vista para mirarme con una sonrisa. Le devolví la sonrisa pero aún así me seguía sintiendo mal.
Llegamos a casa, nos estaba esperando mi madre para cenar. Cenamos rápidamente y nos subimos a mi habitación. Me bañé yo primero y después se metió Chinen. Me quedé en la cama leyendo mientras lo esperaba.
Cuando volvió, entro con una toalla a los hombros, el pelo totalmente mojada, una camiseta interior e iba en boxer. Sus piernas tan blancas me ponían para que negarlo, verlo así solo hacía que me entraran ganas de tirarme para él.
Aparté un poco la vista porque sino no podría resistir un minuto más. Se acercó a mi cama secándose un poco el pelo con la toalla, se sentó en el filo y cogió en mando encendiendo la televisión que había en la esquina de mi cuarto.
-A ver si hay alguna película chula-
-Chinen al final te dormirás-
-Bueno pero mientras nos lavamos los dientes y nos preparamos pues me pongo a ver algo-
-Como quieras-dije riendo un poco.
Fui al cuarto de baño a por mi cepillo y el suyo y me los lleve junto con la crema de dientes a la habitación.
Cuando terminamos apagué la tele y nos metimos los dos en mi cama, notarlo a mi lado solo hacía que me pusiera nervioso pero no lo cambiaba por nada del mundo.
Nos quedamos hablando un rato pero hubo un rato en el cual se quedó callado por lo que supuse que se había quedado durmiendo. Así me giré dándole la espalda para intentar dormir pero Chinen se dio la vuelta pasando sus manos por mi cintura pegándose a mi, comenzó a darme besos por el cuello levantándome la camiseta para acariciarme el torso.
--Continuara--




lunes, 2 de julio de 2012

Secretos capítulo 2

Gracias por los comentarios, me encantan  *///////* aquí os dejo el segundo capítulo


Capítulo 2:



Chinen se había terminado por dormir y mi madre había vuelto.
-Anda si esta el pequeño Chinen aquí- dijo entrando en el salón.
-Mamá, como están arreglando su cuarto ¿se puede quedar a dormir?-
-Claro que sí, por cierto encargate de preparar la comida cielo que voy a ir un momento a ver a su madre-
-Claro- deje a Chinen durmiendo en el sofá y me fui de nuevo a la cocina a preparar el arroz con curry de la comida.
Mientras tanto llegó mi hermana
-¡Volví!-grito entrando por la puerta.
Salí de la cocina que estaba a mano derecha de la puerta de entrada.
-¡Shhh! No grites-señalé el sofá.
Mika entró sin saber que señalaba hasta que vio a Chinen.
-¡Es Chinen!-dijo emocionada mirándolo.
Chinen se despertó abriendo lentamente los ojos encontrándose con Mika, la cual lo miraba fijamente mientras se tapaba la boca.
-Hola, Mika-chan- dijo mientras se incorporaba y se frotaba los ojos.
A Mika le encantaba Chinen, no creo que llegase a estar enamorada de él pero sé que le gustaba mucho, a ella y a todas sus amigas y es que Chinen también era bastante popular entre las chicas, porque era muy lindo y según ellas daban ganas de achucharlo, eso no lo negaba pero no podía no enfurecerme con eso.
-Ne Mika-chan~ me traes agua-le dijo Chinen
-¡C-claro!- vino corriendo a la cocina cogiendo un vaso de agua, yo miraba la escena algo cabreado. -T-toma- dijo dándole el vaso.
-¡Gracias Mikachan!-le dijo dándole un abrazo mientras me miraba sonriendo con malicia.
A Chinen le encantaba ponerme celoso y aunque sabía que era por eso no podía evitar que me hirviera la sangre.
Me giré rápidamente y seguí preparando la comida, Chinen se levanto y vino a la cocina dejando el vaso encima de la mesa para después acercarse a mi.
-No te enfades-me susurró y después me mordisco suavemente la oreja, lo que hizo que me recorriera un escalofrío por todo el cuerpo. Lo miré con los ojos muy abiertos y él solo me miraba picaramente mientras volvía al salón. En aquellos momentos temía porque nos descubriesen porque no me podía resistir a Chinen, me daban ganas de cogerlo y besarlo allí mismo pero tenía que mantener la compostura.
Terminé de hacer la comida y llegó mi madre, así que pusimos la mesa y nos sentamos los cuatro a comer. Mi padre ese día tenía una reunión así que no vendría.
-Entonces te quedas a dormir esta noche ¿no?- le preguntó mi madre a Chinen.
-Sí, tenía ganas-dijo sonriendo
-¡¿Te quedas?!-dijo Mika emocionada.
-¡Sí, pero tú te quedas en tu cuarto!- dije rápidamente algo furioso ya.
-Jo.. pero....-
-¡Nada de peros!-
-Mika, si quieres duermes conmigo que papá hoy se tiene que quedar fuera- le dijo mi madre.
-Bueno vale..-
Seguí comiendo algo enfadado, no soportaba que mi hermana estuviera siempre detrás de Chinen...
Estaba concentrado comiendo mientras pensaba en mis cosas cuando noté que Chinen acercó su mano a mi pierna y empezó a acariciarla acercándose a mi miembro. Me comencé a poner nervioso y se me fue la comida por mal sitio así que comencé a tose.
-Ryosuke, hijo, que te ahogas bebé agua- me acercó el vaso llenándolo con agua, bebí rápidamente y miré de reojo a Chinen, él estaba riéndose mientras comía
Siempre me ponía en situaciones comprometidas, yo me ponía nervioso y él se lo pasaba genial a mi costa.
Terminamos de comer y decidimos salir a dar una vuelta hasta que llegará la hora de cenar.
Me fui a mi cuarto llevándome a Chinen conmigo y me empecé a quitar la ropa para cambiarme, Chinen me miraba fijamente y a mi la verdad me daba un poco de vergüenza.
-Yamachan... ¿sabes? Eres muy apetitoso-dijo relamiéndose.
-N-no digas tonterías-
-No lo son y lo sabes-dijo levantándose sin dejar de mirarme, acercándose a mi lentamente posando sus manos en mi pecho besándome. Cerré los ojos disfrutando del beso saboreandolo pero de repente se abrió la puerta de golpe, Chinen se apartó de mi rápidamente sentándose tranquilamente como si no hubiera pasado nada pero a mi me dio un pequeño infarto o algo parecido.
-¡¿Qué haces?!- grite porque evidentemente solo mi hermana entraba así a mi cuarto.
-¡Kyaaa! ¡Tapate!- me dijo mientras se llevaba las manos a la cara para no mirarme.
-Encima eso, me estoy cambiando ¡llama antes de entrar!-
-Bueno que venía a por la calculadora- dijo mientras iba corriendo al escritorio de espaldas para no verme cerrando la puerta tras de si.
-Uff... no puedo con ella a veces-
-Que tonta-dijo Chinen riéndose -Anda que me iba a tapar los ojos cuando te veo así-
-Calla-dije riéndome cogiendo la ropa y vistiéndome para salir.
--Continuara--