-No me digas que te has enfadado… si me han dicho que ellos no te gustan-
-¡Pues para tú información esa escoria me ha salvado de cosas peligrosas!-le dije muy furiosa
-Pero…-
-¡Mira mejor no me hablas que ahora mismo para mí tú sí que eres escoria!-le dije yéndome pero me pare y me gire
-Y para tu información ¡Si que me gustan!-
Y me fui de allí muy enfadada pero cuando doble la esquina me los encontré allí todos agrupados
-¿Eh? ¿Qué hacéis aquí? No me digáis que…-
-Si lo hemos escuchado-dijo Ryosuke
Yo me puse roja y me fui para adelante pero Yuri me cogió de un brazo
-Así que te gustamos ¿no?-dijo con una gran sonrisa
-¿A mí? Que va… yo nunca he dicho eso…-
-Si ya lo sabíamos, al final nos cogiste cariño-
-¡JAMÁS! ¡RETIRO LO DICHO! ¡DEJADME!-dije saliendo corriendo
Al final mi grupo fue el que gano la competición, ese día me había dado cuenta de que no eran tan malos…
Me fui a cambiar a la casa de los chicos porque me había dejado mi ropa allí, cuando entre vi mi ropa doblada encima de la mesa con una nota que ponía
“Lo siento por lo de hoy, quizás no fue coincidencia el que nos perdiéramos…
Te dejo tu ropa doblada y seca y espero que puedas perdonarme”
Cogí mi ropa y me la puse y vi en el sofá un secador
-No me creo que haya estado secando la ropa con el secador… -
Cuando termine de cambiarme oí que se abría la puerta
-Ah hola-
-Hola Yuri… gracias por lo de la ropa-
-No hay de que…-
-Toma esta es tu camiseta y gracias-dije sonriendo y salí de allí
Cuando salí del colegio estaba Yuya en la puerta
-Hola-
-Hola¿Qué haces aquí?-
-Nada esperándote para llevarte a tu casa hoy habéis tenido las competiciones esas ¿no?-
-Si ¿cómo lo sabes?-
-Es que las chicas de mi clase han ido-
-Las que te han preguntado eso han sido las de mi clase… me lo han dicho cuando han llegado…-
-Ah… pues me ha sentado mal…-
-Ya me lo han dicho… le has cogido cariño ¿no?-
-Pues la verdad es que sí… sin darme cuenta…-
-Sobre todo a Yuri-
-¡¿Eh?! ¡No!-
Me acompaño hasta mi casa y allí nos despedimos
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-Ya se ha dado un poco de cuenta de que le gusta… creo que ya he perdido…-dijo Yuya
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A la semana siguiente nos dieron las vacaciones de verano…
-Wah~ que bueno es el verano tomando helado~-
-Hahaha pareces una vieja-me dijo Mika
-No te rías es que aquí en este café y tomando un helado se está la mar de bien-
De repente me sonó el teléfono
-¿Sí?-
-Hanako soy yo…-
-Ah ¡Yuya! ¿Qué tal?-
-Puedes quedar hoy-me dijo serio
-Claro…-
-Pues nos vemos esta tarde a las 7 en la puerta del colegio-y acto seguido colgó
-¿Qué quería?-me dijo Mika
-No sé… pero estaba muy serio…-
-Qué raro…-
-Pues sí…-
Me fui a la hora acordada a la puerta del colegio y allí estaba Yuya…
-Hola-
-Hola…-dijo con una cara muy triste
-¿Qué pasa?...-
-Ahora lo sabrás…-
Nos fuimos a un parque cercano y nos sentamos
-Bueno dime ya lo que me quieras decir…-
-Es que quiero que dejemos de ser novios…-
-¡¿Eh?! ¡¿Por qué?! ¡¿Qué he hecho?!-
-No es nada que me hayas hecho… es que me he dado cuenta de una cosa…-
Yo solo estaba callada, no entendía nada
-¿Sabes de lo que me he dado cuenta?-
-No…-
-De que yo no soy el que te gusta…-
-¡¿Hah?! Mira lo siento pero no te entiendo…-
-Lo sé porque tú ni siquiera te has enterado pero te gusta otra persona y eso me duele en lo más hondo de mi corazón pero tengo que hacer realidad el deseo que pedí…-
-¿Deseo?-
-Sí en Tanabata...-
-¿Qué pediste?-
-Tu felicidad y sé que conmigo no la vas a conseguir del todo-
Yo no tenía palabras y encima se me había hecho un nudo en la garganta porque tenía ganas de llorar…
-No te enfades algún día lo entenderás-
-No me podría enfadar contigo…-
-Prométeme una cosa-
-¿Qué?...-
-Que seguiremos saliendo como amigos y me contaras todo lo que te pase ¿Prometido?-
-Si, prometido-
Me acompaño a mi casa y nos despedimos… me fui a la ducha y estuve todo el rato pensando en lo que me había dicho Yuya aunque ya sabía que no estaba enamorada de Yuya porque cuando me dijo de dejarlo tampoco me importo tanto pero no sabía quién era esa persona de la que me había hablado Yuya
Me eche en la cama y me quede dormida pero de madrugada me sonó el móvil que lo tenía al lado, me desperté extrañada y vi que tenía un mensaje, lo abrí y era de Yuri lo que me hizo que me extrañara aún más… el mensaje decía “Sal a la puerta de tu casa”, no sé porque pero le hice caso cuando salí estaba en la puerta esperando
-¿Qué haces aquí?-le dije
-Oh, por fin, ven conmigo-me dijo cogiéndome del brazo
-Pero…-
Me llevo corriendo hasta un edificio muy alto
-Yuri… ¿qué hacemos aquí?-le dije
-Shhhh!! No hagas ruido-
El edificio era un hotel, entramos y no había nadie así que me llevo corriendo a las escaleras, yo le preguntaba pero el solo se limitaba a llevarme corriendo, llegamos al final, yo estaba muy cansada así es que me apoye en la pared, vi que Yuri se saco una llave y abrió una puerta que había
-Ven-me dijo cogiéndome de nuevo el brazo
Estábamos en la azotea del hotel
-¡¿Qué hacemos aquí?!-
-Mira-me dijo girándome
Tenía ante mis ojos unas vistas maravillosas, eran estrellas fugaces…
-Wah, sugoi!!-
-Hahaha ¿a que sí?-
-¡Sí! ¿Cómo sabias que había estrellas fugaces?-
-Lo aprendí de mi madre, siempre me estaba diciendo el día en el que había estrellas fugaces-
-¡Que bonito! Por cierto ¿por qué me has traído?-
-Te vi triste-
-¿Eh? ¿Cuándo?-
-Pues iba a casa de Ryosuke cuando te vi con Yuya en la puerta de tu casa y te vi triste, así es que hable con Yuya y me lo contó, me dijo algo más que fue la razón por la que me lo ha contado pero no te lo puedo decir, Tú mira las estrellas fugaces y pide un deseo-
-Tú también-
-Yo ya lo pedí-
-Que rápido… yo acabo de pedir el mío-
-¿Has pedido algo bueno?-
-¡Pues claro!-
Estuvimos viendo aquello y cuando se termino Yuri me dijo
-Cuidado de hacer ruido-
-¿Eh? ¿Por qué?-
-Porque nos van a descubrir-
-¿Eh? ¿Tú no conoces el sitio?-
-¿Yo? Que va-
--Continuara--
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